miércoles, 14 de julio de 2010

heroínas rubias



"(...) Pero no es sólo eso, sino también una cuestión de estilo: los hombres de los equipos cambian cada pocos años, como cambian los actores cuando se hacen viejos. Y sin embargo parece que en cada club hubiera una mano invisible de un director que hiciera siempre reconocible a cada formación distinta, como resultan inconfundibles las películas de Ford o Lubitsch o Hitchcock. Y así como éstos utilizaban interpretes diferentes pero que les eran afines (nunca John Wayne, por ejemplo, en película de Billy Wilder) habrá jugadores que parecerán nacidos para un equipo o que nunca tendrían cabida en otro. (...) En cuanto al Real Madrid, recuerda a Hitchcock, cuyas películas se ven con el alma en un hilo pero suelen terminar bien: al Madrid, en Europa, le ha gustado a menudo tener tres goles en contra, para remontarlos; y en la Liga atraía mucho ese rumor de inquietud que antaño provocaba el Athletic de Bilbao cuando se adelantaba en el marcador. Y no se olvide que, también como Hitchcock, ha tenido preferencia siempre por las heroínas rubias: Di Stéfano, Kopa, Netzer, Velázquez, Pardeza, Prosinecki y sobre todo Butragueño siguen siendo lo más parecido que se ha visto nunca en un campo de fútbol a Grace Kelly amenazada, pero con tijeras."
javier marías, "el estilo y los nombres", 1992.

5 comentarios:

  1. hey dude! no sé cómo llegué a una foto del entrenador del nuevo equipo de Raúl... jugando al ajedrez pero en plan kasparov total, se le veía super pro!!! Toma casualidad. No he investigado la conexión Magath (creo que se llama así) - ajedrez, pero si te interesa quizás encuentres ahí alguna anécdota curiosa.

    ResponderEliminar
  2. Sois los mejores. No dejeis de escribir nunca!

    ResponderEliminar
  3. ¿ya no actualizáis?

    ResponderEliminar
  4. jarroson:
    nos estaba dando algo de pereza actualizar pues tenemos muy presente la afirmación de hegel "la felicidad sólo escribe páginas en blanco en la historia".
    nos han gustado tus artículos en baúl y puti, por cierto.

    ResponderEliminar