los espiritismos del madrid

habiendo tocado año malo, el análisis dramático y trascendental no puede faltar: ocurre siempre. está en casi todas las conversaciones: "el madrid no tiene una identidad"
esa sentencia es cuando menos audaz: un club que vomita títulos sin crear ninguna escuela ni contar con referencias es algo insólito. o sencillamente una idiotez.
la causa está como casi siempre en marearse mirándose en el espejo del enemigo: desde que cruyff llegó a finales de los 80, el barcelona ha jugado siempre con dos extremos y un delantero centro. 3-4-3 o 4-3-3. el modelo holandés clásico del ajax.
pero es que en ese mismo periodo el real madrid ha jugado siempre con dos delanteros centro, una coincidencia extraña si eso dura un cuarto de siglo, y por el medio ha habido una moda muy seria del 4-2-3-1.


cada vez que el madrid gana un partido fuera de casa al contragolpe o con acciones aisladas de sus delanteros, se repite lo mismo: "el madrid no tiene estilo", y son años y años viendo goles aislados de raúl , ronaldo, van nilstelrooy o zamorano en partidos sin controlar en sitios inhospitos para no ver la realidad: eso forma parte del estilo del club.
las influencias, en un club con fervor por la victoria sempiterna, son dolorosas y se incrustan en el subconsciente con ocasión de tremendas derrotas ante poderosos rivales.
en los años de la quinta del buitre el orgullo del real se hundió por una derrota concreta: el 5-0 ante el milán de los holandeses, en cuartos de final de la copa de europa, el 19 de abril de 1989. desde entonces, el discurso es el mismo: denigración pública del juego italiano en general, pero asunción de muchos de sus principios tácticos, y la contratación por dos veces de capello, representante afamado del italianismo avanzado contemporáneo.

hay una repetición empírica: el madrid juega con al menos dos delanteros centro en su once inicial, y muchas veces con tres. el gusto por delanteros clásicos eminentemente resolutivos es quizás residuo de una admiración subterránea e incofesable por todo lo alemán que asoló cerebros madridistas durante décadas: eran gente alta, fuerte, competitiva y "al primer bostezo, gol de los alemanes".
de nuevo se repite el mismo patrón, negándose el valor estético de los revolcones que alemania, concentrada cual droga dura en el bayern munich, le propinó al madrid. eliminaciones dolorosas en copa de europa, con juanito pisándole la cabeza a matthaus y así. en la última copa de europa ganada por al madrid, el bayern goleó dos veces: 2-4 en el bernabeu y 4-1 en munich, en la fase de grupos. en esas derrotas el bayern empleaba un rústico 5-2-3, y hacía gala de poca elaboración y mucha pegada. algo que se asemeja bastante a las descripciones de muchos partidos del madrid fuera de casa, e incluso en el bernabeu. el valor estético se niega, pero la influencia se filtra.
eso te han desvelado desde cuevas recónditas los madridistas ateos: la admiración secreta por valores que alemanes e italianos enseñaron al real madrid a base de goleadas de época es lo que define su estilo, que es el de un superviviente.

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en la foto, michel se cambia la camiseta con maldini tras el milán 5-real madrid 0 de 1989