en una inquietante paradoja histórica, los varapalos de las experiencias comunales son varapalos para el real madrid.
tras el levantamiento fascista del 36 y la guerra civil, la liga se reanudó en la temporada 1939-40, siendo ganador el athletic de bilbao. el madrid no se hizo con una sola liga hasta el campeonato 1953-54: un auténtico páramo histórico.
como un eco truculento, la extinción oficial de la unión soviética, el 25 de diciembre de 1991, ilustró fantasmagóricamente una época deleznable para el real madrid: el primer lustro de los 90. con la quinta del buitre en decadencia y publicidad de un concesionario de coches en la camiseta, el madrid parecía sentir el desmoronamiento soviético, llegando a la cúspide del humor tétrico en la temporada 1992-93.
el sórdido técnico benito floro, famoso por su gestión del albacete balompié ("el queso mecánico") llegó al madrid para instaurar sus innovadores métodos paranormales.
una de sus primeras decisiones fue la contratación de un psicólogo para tratar a la plantilla. el elegido fue don emilio cidad maestro, que aplicó diversos tratamientos de choque a los jugadores:
-comerse un limón imaginario.
-recitar una poesía con los pantalones bajados a la altura de los pies.
-gritar con energía después de pensar en algo "malo, muy malo"
---
en la fotografía tenemos a benito floro y su equipo técnico explorando el "cannonball"
lunes, 8 de marzo de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
quiero un chandal lila
ResponderEliminarfloro es un personaje bizarro. luego se recicló como super-directivo o algo similar, solía aparecer en esos actos extraños en los que ex-madridistas reinsertados por la derecha (rollo Butragueño) aprovechan para lucir corbata nueva.
ResponderEliminarsu etapa de directivo me la perdí, gracias al altísimo
ResponderEliminarEl fútbol, a veces, es justo.
ResponderEliminarDa gusto ver a Florentino y a Esperanza juntitos en el palco.
Patético.
hombre, victor, tú por aquí, cuán sorprendente: qué aguda y serena reflexión!
ResponderEliminarEse extraño ser que un día aterrizó en el Planeta Tierra: Benito Floro.
ResponderEliminarQue se lo vuelvan a llevar sus compatriotas los extraterrestres, por favor!! En un mundo sano sobra gente como el extraño ser Floro.
Lo de los tratamientos de choque es cierto?
ResponderEliminar